Los sistemas tradicionales de control de acceso biométrico son tecnologías que utilizan características físicas o de comportamiento únicas de una persona para verificar su identidad y permitir o restringir el acceso a un determinado lugar o recurso. Estos sistemas se han convertido en una solución estándar para garantizar la seguridad de instalaciones y activos al asegurar que solo el personal autorizado pueda ingresar a áreas restringidas. Estos sistemas pueden integrarse con otros sistemas de seguridad como ERP, bitácoras y centros de operaciones de seguridad (SOC), permitiendo una gestión centralizada y en tiempo real.
La autenticación biométrica es única e imposible de replicar fácilmente, lo que mejora la protección contra el acceso no autorizado.
Tecnologías como el reconocimiento facial permiten un acceso rápido y sin necesidad de contacto físico, mejorando la higiene y la experiencia del usuario.
Los sistemas biométricos se integran fácilmente con otros sistemas de gestión, como ERP y SOC, facilitando una administración centralizada de la seguridad.
Al eliminar la necesidad de gestionar credenciales físicas, los costos de mantenimiento y administración se reducen significativamente.
Ofrecemos soluciones de última generación diseñadas a medida para prevenir riesgos en compañías, instituciones, instalaciones industriales y propiedades privadas.